habitual oír que la felicidad no existe, sino tan solo momentos felices. Entre esos momentos están:
El instante en que usted se da cuenta de su amor por otra persona y el primer beso.
Reírse de sí mismo con o sin motivos. (Uno siempre tiene motivos para ser chistoso consigo.)
Encontrar decenas de cartas en el buzón o montones de email en la computadora, cuando vuelves de vacaciones.
Comer chocolate
Escuchar tu canción favorita en la radio o aquella que te hace recordar a alguien muy especial.
Otro buen momento es acostarte en tu cama (si es acompañado mejor) y escuchar cómo llueve afuera o salir de la ducha y encontrar la toalla calientita.
¿No es un momento feliz ese de aprobar tu último examen?
¿Y qué me dices de recibir una llamada de alguien que hace mucho no ves y te cuenta que soñaba estar pedaleando por una calle de otra ciudad, y de pronto el pavimento le pareció conocido, abrió los ojos y se dio cuenta de que rodaba exactamente por tu calle, y pasó a saludarte, pero no estabas y entonces, en ese sueño, llamó entonces, en ese sueño, llamó por teléfono y se despertó cuando respondiste tú.
Y el feliz momento en que escuchas accidentalmente que alguien dice algo bueno de ti, sin aspirar a que lo oigas.
Ver felices a las personas que quieres, formar parte de un buen equipo, hacer nuevos amigos.
Volver a ver a un viejo amigo y saber que el cariño y la amistad se mantienen en su sitio, y sigue fiel como tú a las ideas que los juntaron hace cuarentipico de años.
Qué momento inmenso ese de mirar un atardecer, pasear con tu perro, tener quien te quiera y a quien querer,e incluso, conocer de amores palestinos, que sobreviven al naufragio y se agarran apasionadamente a la tabla sacudida por un mar violento.
Miércoles, 23 de Mayo de 2007 08:47. Autor:
Mariela Padilla Laurencio. Tema:
Amor.
Comentarios »
Ir a formularioAutor: david esau perez apenentonces, en ese sueño, llamó por teléfono y se despertó cuando respondiste tú.
Y el feliz momento en que escuchas accidentalmente que alguien dice algo bueno de ti, sin aspirar a que lo oigas.
Ver felices a las personas que quieres, formar parte de un buen equipo, hacer nuevos amigos.
Volver a ver a un viejo amigo y saber que el cariño y la amistad se mantienen en su sitio, y sigue fiel como tú a las ideas que los juntaron hace cuarentipico de años.
Qué momento inmenso ese de mirar un atardecer, pasear con tu perro, tener quien te quiera y a quien querer,e incluso, conocer de amores palestinos, que sobreviven al naufragio y se agarran apasionadamente a la tabla sacudida por un mar violento.
Miércoles, 23 de Mayo de 2007 08:47. Autor:
Mariela Padilla Laurencio. Tema:
Amor.
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Ir a formularioentonces, en ese sueño, llamó por teléfono y se despertó cuando respondiste tú.
Y el feliz momento en que escuchas accidentalmente que alguien dice algo bueno de ti, sin aspirar a que lo oigas.
Ver felices a las personas que quieres, formar parte de un buen equipo, hacer nuevos amigos.
Volver a ver a un viejo amigo y saber que el cariño y la amistad se mantienen en su sitio, y sigue fiel como tú a las ideas que los juntaron hace cuarentipico de años.
Qué momento inmenso ese de mirar un atardecer, pasear con tu perro, tener quien te quiera y a quien querer,e incluso, conocer de amores palestinos, que sobreviven al naufragio y se agarran apasionadamente a la tabla sacudida por un mar violento.
Miércoles, 23 de Mayo de 2007 08:47. Autor:
Mariela Padilla Laurencio. Tema:
Amor.
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Autor: david esau perez apen